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TEORÍAS PEDAGÓGICAS:

ENFOQUE CONDUCTISTA.

Para el conductismo, la mente se comporta como “caja negra” donde el conocimiento se percibe a través de la conducta, como manifestación externa de los procesos mentales internos.de  esta forma, el aprendizaje basado en este modelo pedagógico sugiere medir la efectividad en términos de resultados.los diseños institucionales que asumen esta perspectiva se orienta sobre los esfuerzos de la taxonomía formulada por Benjamin Bloom (1956) y los trabajos posteriores de Robert Gagne (1985).

Las criticas del conductismo están basadas en el hecho de que determinados tipos de aprendizaje solo proporciona una descripción cuantitativa del saber y no permiten conocer el estado en el que encuentre el individuo ni los procesos mentales que podrían facilitar o mejorar el aprendizaje.

ENFOQUE COGNOSCITIVO

El enfoque cognoscitivo como tendencia pedagógica moderna se fundamenta en el análisis de los aspectos psicológicos que intervienen en los procesos que conducen al conocimiento de la realidad objetiva. Sus bases principales de cara a la formación on-line serían las siguientes:

Existe una mejora significativa del aprendizaje cuando se utilizan estímulos complementarios como gráficos, voz o animaciones, videos, fotografías, etc. El aprendizaje se ve favorecido cuando la estructura está lógicamente organizada. En este sentido, los contenidos deben diseñarse bajo este principio. Debe promoverse una diversidad de actividades, utilizando recursos sincrónicos o asincrónicos. Bajo este enfoque, los estudiantes pueden lograr un aprendizaje más significativo cuando se produce cierto nivel de interacción con el entorno, ya que, de esta manera, el conocimiento pasa a formar parte de la estructura cognitiva del/de la estudiante, con lo que necesariamente deben aumentar las posibilidades de retención y transferencia del aprendizaje a nuevos contextos.

ENFOQUE CONTRUCTIVISTA.

Dentro de un enfoque constructivista, el aprendizaje es visto como un proceso de construcción individual y social y, desde esta premisa, este modelo es muy utilizado en los diseños de acciones formativas on-line en la medida en que potencia la individualidad de los sujetos pero, a su vez, valora la interacción dialógica que se produce con otros elementos del acto didáctico.

Se puede decir que la construcción del conocimiento es, en realidad, un proceso de elaboración, donde el/la estudiante selecciona, organiza y transforma la información recibida de diversas fuentes (incluyendo al docente), estableciendo relaciones entre dicha información y sus ideas y conocimientos previos.

Este modelo potencia dos grandes aspectos relativos al diseño instruccional:

El alumnado es el responsable último de su propio proceso de aprendizaje.

El/la docente se convierte en una persona orientadora o facilitadora.

Además, el constructivismo:
 Potencia elementos de interrelación entre participantes, pues asume que el conocimiento es co producido entre todos los participantes.

 Propicia la generación de contextos relevantes.

·El proceso de enseñanza-aprendizaje es activo, colaborativo, intencional y contextualizado.

·Entre los muchos teóricos que han ayudado a fundamentar el modelo constructivista de aprendizaje, destaca L. S. Vygotski con su teoría sociocultural. Para este teórico, la relación entre el/la estudiante y el objeto de estudio está mediada por la actividad que el/la primero/a realiza sobre el objeto utilizando instrumentos socioculturales: las herramientas y los signos. Las herramientas permiten al estudiante realizar cambios sobre el objeto de estudio y los signos, por su parte, permiten cambios del objeto al estudiante. Es decir, el empleo de las herramientas causa, a partir de una orientación externa, transformaciones en los objetos. Los signos provocan evoluciones en el individuo que realiza la actividad y se orientan, por lo tanto, internamente.

 ESTRUCTURA DE LA FORMACION VIRTUAL

Actualmente, los productos formativos en línea, dirigidos a personas adultas y en pleno ejercicio de su actividad profesional, tienen en cuenta un trabajo personal y colaborativo dentro del espacio virtual de aprendizaje. Para que dicho trabajo sea una realidad, debe organizarse detalladamente un proceso formativo donde se delimiten con cuidado cada uno de los elementos que formarán parte del proceso de enseñanza-aprendizaje.

En este sentido, podemos destacar que, entre los elementos que intervienen en el diseño didáctico o del proceso formativo, generalmente, están los siguientes:

• El/la estudiante.

• El/la tutor/a o formador/a on-line.

• El contexto de aprendizaje.

• El grupo de pares (otros estudiantes).

• Los contenidos multimedia.

• Los objetivos de aprendizaje.

• Las actividades de aprendizaje.

• Los recursos didácticos en línea.

• La planificación docente.

• La evaluación.

• El entorno de aprendizaje y sus herramientas de comunicación. 

Cabe destacar que, en un proceso de formación on-line, algunos de estos elementos pueden quedar más difusos, por lo que el/la formador/a debe realizar un esfuerzo constante de analizar las relaciones entre todos los elementos que intervienen en la acción formativa de manera que se asegure que el resultado de dicho proceso sea óptimo.

El proceso se diseñará de manera algo diversa, dependiendo del modelo en el cual esté centrada la formación on-line: basado en el profesorado o en el estudiantado.

Así, un enfoque centrado en el docente se caracteriza por iniciarse con una planificación estructurada: un programa, un plan docente, un calendario, etc. Desde este punto de vista, las competencias del docente están fuertemente vinculadas al seguimiento de dicha planificación.

En cambio, un enfoque centrado en el estudiante se caracteriza por una planificación inicial que presta mucha atención a la realidad del proceso de enseñanza-aprendizaje mientras éste se está desarrollando. La planificación inicial es relevante, pero el modelo centrado en el alumnado permite hacer concesiones a esta planificación inicial siempre que se respeten los objetivos establecidos antes de iniciar el proceso.

Se puede identificar la estructuración de la formación en línea desde los sectores más álgidos donde reside el éxito de la propuesta formativa que se ofrece. Refiriéndose a sus pilares o a su base estructural. En este sentido, se destacan tres grandes componentes que estructuran la formación on-line:

JDD